Succión
Muchas personas sufren sudor excesivo especialmente en las axilas, llamado hiperhidrosis axilar. El desarrollo y el refinamiento de técnicas adicionales, donde glándulas sudoríparas son extraídas, reducen el sudor en los pacientes. La succión de las glándulas sudoríparas axilares ha sido solo aplicada en centros selectivos en los últimos años. Hasta ahora, esta técnica muestra complicaciones reiteradas. Es por este motivo, que la intervención tiene que ser repetida. También el uso de cánulas, utilizadas para las liposucciones, dan dificultades con respecto a esta operación.
Las complicaciones reiteradas , han podido ser disminuidas notablemente por el refinamiento y el desarrollo de las técnicas y por la introducción de nuevas cánulas especiales. Las posibles complicaciones se hacen visibles, por ejemplo en pequeñas contusiones en el área axilar, que degenera después de un periodo corto.
La operación, mínimamente invasiva, es realizada bajo una anestesia local y por lo tanto es una operación ambulatoria. Para conseguir acceso al área quirúrgica, se necesitan sólo dos pequeñas incisiones debajo y encima de la axila. Subsiguientemente, después de ablandar el tejido por la dilución de la anestesia, las glándulas sudoríparas son succionadas. Las incisiones quirúrgicas son tapadas y se aplica una venda compresiva. El edema post-operatorio disminuye en pocos días.
Generalmente, los pacientes vuelven a su vida cotidiana directamente después de la intervención. Algunos vuelven al trabajo, aún después de la operación. Sin embargo, se recomienda unos días de reposo después de la operación, para poder realizar exámenes de control posiblemente requeridos.
Luego de la operación, las axilas se encuentran casi secas debido a que las glándulas sudoríparas ya han sido extraidas. Estas glándulas no podrán regenerarse. Esto no tiene como resultado la compensación de transpiración en otras áreas del cuerpo. Sólo el suministro nervioso de las glándulas sudoríparas restantes puede regenerarse otra vez, es por eso, que en el curso del tiempo puede restaurarse un sudor muy ligero.
Las complicaciones reiteradas , han podido ser disminuidas notablemente por el refinamiento y el desarrollo de las técnicas y por la introducción de nuevas cánulas especiales. Las posibles complicaciones se hacen visibles, por ejemplo en pequeñas contusiones en el área axilar, que degenera después de un periodo corto.
La operación, mínimamente invasiva, es realizada bajo una anestesia local y por lo tanto es una operación ambulatoria. Para conseguir acceso al área quirúrgica, se necesitan sólo dos pequeñas incisiones debajo y encima de la axila. Subsiguientemente, después de ablandar el tejido por la dilución de la anestesia, las glándulas sudoríparas son succionadas. Las incisiones quirúrgicas son tapadas y se aplica una venda compresiva. El edema post-operatorio disminuye en pocos días.
Generalmente, los pacientes vuelven a su vida cotidiana directamente después de la intervención. Algunos vuelven al trabajo, aún después de la operación. Sin embargo, se recomienda unos días de reposo después de la operación, para poder realizar exámenes de control posiblemente requeridos.
Luego de la operación, las axilas se encuentran casi secas debido a que las glándulas sudoríparas ya han sido extraidas. Estas glándulas no podrán regenerarse. Esto no tiene como resultado la compensación de transpiración en otras áreas del cuerpo. Sólo el suministro nervioso de las glándulas sudoríparas restantes puede regenerarse otra vez, es por eso, que en el curso del tiempo puede restaurarse un sudor muy ligero.